Honda Transalp 750: ¿cuánto consume?, velocidad final y sensaciones de su motor
No subimos a la novedad más importante de Honda para el segmento trail y te contamos todo lo referente a su motor.

Su bicilíndrico de 755 cc, el refinamiento del conjunto y una electrónica bien calibrada hacen de la Honda Transalp una trail tan dócil como efectiva, ideal para viajar, por cualquier camino. Te contamos cómo se mueve, al detalle.
La nueva Honda Transalp 750 tiene en su motor uno de los argumentos más sólidos para explicar su éxito. Hereda el mismo bloque bicilíndrico en paralelo de 755 cc que utiliza la Hornet, pero con una puesta a punto específica que lo vuelve más fino, dócil y adaptado al espíritu viajero del modelo. Con distribución OHC y sistema Unicam, cigüeñal calado a 270° y refrigeración líquida, logra un conjunto compacto, eficiente y de mantenimiento sencillo.
Honda Transalp 750: Motor, entrega de potencia y autonomía
La potencia declarada es de 91,8 CV a 9.500 rpm, con un par máximo de 75 Nm a 7.250 rpm. Pero más allá de los números, lo que distingue a esta mecánica es su manera de entregar la fuerza. Desde el bajo y medio régimen empuja con suavidad y linealidad, lo que la convierte en una moto muy fácil de llevar. Incluso en modo Sport, la respuesta es predecible y controlable, sin sobresaltos. En los modos Standard o Rain, se vuelve aún más amable, ideal para el uso diario o rutas de baja adherencia.
El motor responde con una elasticidad sorprendente, permitiendo crucerear con soltura a ritmos altos, sin vibraciones ni fatiga. Puede rozar los 200 km/h -195 declarados por la marca- y mantener una velocidad de viaje elevada sin importar la carga o el viento. Es, al mismo tiempo, un propulsor con alma deportiva y espíritu sereno, equilibrado y silencioso cuando se lo requiere.

La caja de seis marchas merece un párrafo aparte. De accionamiento corto y preciso, se asocia a un embrague asistido y anti-rebote que suaviza las reducciones y mejora la tracción en curvas o en caminos de ripio. En esta unidad, además, estaba presente el quickshifter bidireccional opcional, una verdadera delicia por su rapidez y suavidad, con la posibilidad de ajustar su dureza en tres niveles distintos para ascenso y descenso de marchas.
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En materia de consumo, el trabajo de Honda sobre la electrónica se hace notar. A velocidades legales, la Transalp promedia menos de 5 litros cada 100 km, lo que, combinado con su tanque de 16,9 litros, le otorga una autonomía cercana a los 350 km. Un registro excelente para una moto de 91 caballos, que reafirma la eficiencia de este nuevo motor.
Honda Transalp 750: Sensaciones de manejo y electrónica
Las sensaciones de manejo acompañan el nivel mecánico. La entrega de potencia es siempre lineal, sin vacíos ni tironeos, con un sonido de escape agradable que gana tono a medida que suben las vueltas. La respuesta al acelerador ride-by-wire es inmediata, pero sin brusquedades.
La electrónica permite adaptar la moto a cada escenario mediante sus cuatro modos de conducción -Standard, Sport, Gravel y Rain- y dos completamente configurables.
Cada modo modifica parámetros de potencia, freno motor, control de tracción y ABS, haciendo que la Transalp cambie de personalidad con solo pulsar un botón. En ciudad se siente ágil y fácil, casi como una moto más chica; en ruta es estable y relajada; y fuera del asfalto sorprende por su nobleza y tracción, con la posibilidad de desconectar el ABS trasero y ajustar el control de tracción a gusto.

El equipamiento electrónico está a la altura de una trail moderna: instrumental TFT de 5″ con conectividad, joystick retroiluminado para navegar entre menús y toda la información disponible sobre consumo, autonomía y modos de manejo. La app Honda RoadSync todavía no está habilitada para nuestra región, pero la pantalla ofrece una experiencia completa, clara y de rápida lectura.
En síntesis, el corazón bicilíndrico de la Transalp 750 no solo le da vida, sino también carácter. Es potente sin ser exigente, refinado sin perder emoción. La caja y el quickshifter elevan la experiencia de manejo, mientras que el consumo contenido y la autonomía la vuelven ideal para viajar lejos. Honda logró combinar tecnología, suavidad y rendimiento en una moto que transmite, en cada giro de acelerador, lo mejor de la escuela japonesa.


