La moto de Kawasaki de todos los récords: 256 km/h y arrastrando a una persona

Si de batir récords se trata, no hay límites, al menos en el mundo de las dos ruedas. Y está claro que no es nada sencillo, por lo que lograrlo implica un verdadero hito, como es el caso de la Kawasaki Ninja H2 SX, conocida por su increíble potencia y velocidad, que fue recientemente protagonista de una hazaña que desafía lo imaginable. 

Jonnie Davies, un piloto británico y doble campeón nacional de stunt, inscribió su nombre en el Libro Guinness de los Récords al ser arrastrado por su Kawasaki Ninja H2 SX a una velocidad de 256 km/h. Si circular a esta es apto solo para una deportiva, haberlo hecho con una persona sujetada desde atrás (ejerce resistencia y afecta la aerodinámica) parece hasta utópico.

Todos los detalles sobre la hazaña de la motocicleta de Kawasaki

El suceso tuvo lugar el 18 de agosto en el aeródromo de Elvington Airfield, un lugar que ya fue testigo de varios récords. Esta vez, sin embargo, la proeza de Davies es especialmente impactante. En su primer intento, alcanzó una velocidad de 248.92 km/h, la cual resultó insuficiente para romper el récord anterior. 

No obstante, el desafío no terminaría, ya que, en su segunda oportunidad, superó su propia marca y, ahí sí, estableció un nuevo hito al alcanzar los mencionados 256.72 km/h con la Kawasaki Ninja H2 SX. De esta manera, ocupa el primer puesto y el segundo quedó para Gary Rothwell, otro piloto británico, con 241.54 en 1999.

Cabe mencionar que la clave detrás de esta maniobra extrema radica en la preparación y el equipo especializado, dada la destreza que hay que tener y la protección. Tal como se aprecia en las imágenes, Davies utilizó unas botas con base de titanio, diseñadas para soportar las altísimas temperaturas generadas por la fricción al deslizarse a esas velocidades.

Además, la técnica es crucial. Luego de descolgarse por la parte trasera de la moto, Davies tuvo que mantener el equilibrio mientras se deslizaba a lo largo del asfalto, aferrado al colín de la Kawasaki Ninja H2 SX, una moto adecuada para este tipo de acciones.

Acelerador secundario, otro accesorio clave

No todo es cuestión de mantenerse firme, más allá de que sea imprescindible. El verdadero desafío radica en alcanzar la velocidad máxima mientras se está siendo arrastrado. Para ello, el británico contaba con un acelerador secundario ubicado en el colín de la moto que empleaba para alcanzar la velocidad deseada. Es otra de las acciones complejas, dado que la persona está obligada a operar el vehículo desde una posición muy difícil.

Finalmente, la hazaña sólo se considera completa cuando el piloto regresa a la posición convencional sobre la moto y la detiene de manera segura, algo que también consiguió  Jonnie Davies. Además de significar una marca personal, desafió los límites de la ingeniería, habilidad y valentía humana.