¿Me compro la Kawasaki ZX-4R o espero a la Kove 450 RR?
A la espera de la llegada de la Kove 450 RR a los concesionarios, te contamos qué diferencias tiene con la Kawasaki Ninja ZX-4R, en los papeles.
Kawasaki refundó el segmento de las deportivas medianas con motores de cuatro cilindros, una categoría que parece más experimental que tendenciosa. Si bien ya hay varias marcas con propuestas de estas características, las ventas no son masivas, pero sí son las justas para conformar un nicho hecho para los que quieren deportividad en un envase súper compacto.
Una de las primeras rivales que le apareció a la deportiva de Kawasaki fue la Kove 450 RR, una buena decisión de la empresa china que reaccionó rápido con un producto bastante interesante por rendimiento y por precio. Ahora, la empresa china llegó a Argentina y la deportiva será, sin dudas, uno de los modelos más esperados. Pero, ¿en qué se diferencia con la Kawasaki? ¿Será más barata? ¿Vale la pena esperar su llegada a los concesionarios?
En este segmento, la Kawasaki Ninja ZX-4R se posicionó como una referencia, gracias a su motor tetracilíndrico de 399 cc que genera 77 CV (80 CV con RAM Air) y un equipamiento bastante premium. Con esas cifras, puede superar en rendimiento a su hermana mayor, la Ninja 650, que es bicilíndrica.
Por su parte, la Kove 450 RR está equipada con un motor tetracilíndrico en línea de 443 cc, que entrega una potencia máxima de 70 CV gracias a la incorporación de un sistema RAM Air que optimiza el rendimiento a altas velocidades. Este sistema de admisión forzada de aire agrega hasta 3 CV extra a partir de los 150 km/h, permitiendo que esta moto alcance una velocidad punta de 220 km/h.
Con esas cifras vistas, la Kawasaki tiene un plus de casi 10 CV con menor cilindrada, lo que habla de lo “ajustado” que está este bloque. Por su parte, la casa china lleva un motor un poco más holgado, con mayor cilindrada y menos potencia, tal vez pensado en la confiabilidad.
En cuanto a lo electrónico, ambas demuestran su ADN deportivo con varios gadgets. La Kawasaki ofrece 3 modos de conducción más uno personalizable (Sport, Road, Rain y Rider) y el control de tracción (KTRC), mientras que el cambio rápido bidireccional (KQS) es opcional. En cambio, la Kove ofrece tres modos de conducción: Sport, Eco y Launch, además del control de tracción y embrague antibloqueo, a lo que hay que sumar el quickshifter con funcionalidad solo hacia arriba y que está disponible solamente en el modelo “Pro”.
En el apartado de suspensiones, la deportiva china tiene componentes bastante destacados: ofrece una horquilla invertida KYB multiajustable y un monoamortiguador trasero de la misma marca, también ajustable y con un depósito de gas separado. En el sistema de frenos, la Kove incorpora pinzas radiales Taisko de cuatro pistones en el eje delantero, con discos de 300 mm, y un disco trasero de 220 mm. Este conjunto está complementado por un ABS convencional.
En cuanto a suspensiones, la Kawasaki Ninja ZX-4R también cuenta con elementos ajustables firmados por Showa, con una horquilla invertida SFF-BP sin regulación y un amortiguador trasero regulable. La frenada se encomendó a dos discos de 290 mm en el eje delantero, mordidos por pinzas de anclaje radial, y un único disco detrás; asistidos por el ABS.
El peso es un detalle no menor en esta comparativa. La Kove 450 RR posee un chasis tubular de acero (denominado HC700) muy liviano, que pesa apenas 7,2 kg, y un subchasis de aluminio que suma solo 2,6 kg. Con un peso total de 165 kg, combina una relación peso-potencia muy competente entre las deportivas de media cilindrada. Además, con una distancia entre ejes de solo 1.395 mm, promete agilidad y estabilidad excepcionales en curvas y rectas.
Dudar de la ciclística y del comportamiento dinámico de una Kawasaki con apellido Ninja sería una falta de respeto, pero lo que sí hay que subrayar es que el peso total de la ZX-4R es de 188 kg, lo que la ubica apenas por encima de su competidora.
Por el lado de la instrumentación, la deportiva china incluye una pantalla TFT con conectividad y sistema de mirroring para proyectar la información de ciertas aplicaciones desde el teléfono celular. En ese sentido, la Kawasaki responde con una pantalla LCD en color de 4,3” con diferentes modos de visualización, incluyendo un modo circuito que muestra: tiempos por vuelta, las posiciones de las marchas y una mejor lectura del régimen de giro a partir de las 10.000 vueltas. Cuenta, además, con opciones de conectividad a través de la app Rideology.
El diseño de la Kove 450 RR Pro tiene una clara inspiración en modelos deportivos icónicos, con un carenado integral que incluye apéndices aerodinámicos frontales para mejorar la estabilidad a alta velocidad. El asiento partido para piloto y pasajero, combinado con un colín que también integra winglets laterales, refuerza su aspecto deportivo. Por su parte, la Ninja tiene un aspecto bien diferente y que deriva directamente de las ZX más grandes, pero no posee apéndices aerodinámicos.
Sin embargo, la Kove 450 RR Pro responde con una relación peso-potencia más favorable y un precio potencialmente más accesible que, si bien todavía no está confirmado en Argentina, posiblemente sea más bajo, al igual que en la mayoría de los mercados donde conviven ambos modelos. La Kawasaki en Argentina comienza en los 24.500 dólares, pero en el mercado chino (donde convive con la Kove) cuesta 69.800 yuanes, es decir, 9500 dólares aproximadamente. Ese precio la pone bastante por encima de la Kove 450 RR, que cuesta 5400 dólares, cerca de un 40% menos.
De todos modos, son especulaciones. Se sabe que los precios en Argentina suelen ser bastante superiores, pero tendría sentido que la Kove tenga una diferencia sustancial en el precio final.