Desde una Harley-Davidson de más de 100 años a una moto de 300.000 dólares: colecciones para recordar
Una moto de colección siempre es interesante de admirar. Mirá.
El pasado 7 de enero fue el día internacional del coleccionista. Es un día en el que se festeja a quienes se dedican a recolectar objetos difíciles de encontrar, fuera de serie y disponen de su tiempo y espacio para almacenarlos. El coleccionismo depende de gustos personales, y como a nosotros nos gustan las motos, acompañanos a conocer dos colecciones que te van a sorprender
La mayor colección de motos de Latinoamérica
En primer lugar, tenemos la mayor colección de motos de Latinoamérica con más de 110 motos de Óscar Peralta, dueño de After Cycle, una empresa que se dedica a modificar motos de todo tipo, al gusto del cliente. Cuenta, que su pasión por los vehículos de dos ruedas, viene directamente desde su padre, que ya desde los 5 años, andaba por el patio chocando con lo que se cruzara, en una pequeña 50cc: “Rompí macetas, atropelle al perro, desde ahi me introduje al mundo de las motos y nunca paré”.
Su primera moto fue una Yamaha 80 GT, hace poco más de 20 años, que esa pequeña dos tiempos comenzó con la colección. Ordenadas desde la más vieja a la más nueva, el galpón de Peralta es gigantesco, para albergar a más de 110 motos de todas las índoles, y por supuesto, todas tienen una historia.
Cómo todo fanático, todas están en perfecto estado de conservación, y de mantenimiento; el piso del lugar parece el de un quirófano.
La moto más antigua del lugar, es una Harley-Davidson Board Track Racer de 1916, que con más de 100 años de antigüedad, el estado es parecido a una 0 kilómetro. Fue creada para competir en óvalos con piso de madera de la época. Tiene un motor de 2 cilindros en V, de 61cc, y marcó el destino de Harley cuando había mucha rivalidad con el resto de las marcas. Su particularidad más asombrosa, es una bomba de aceite manual a la altura del tanque de nafta, que accionaba el propio piloto, para lubricar el motor y el excedente del aceite, caía por un escurridero que ayudaba a lubricar la cadena. Simplemente genial.
Obviamente no vamos a poder detallar el centenar de unidades de Óscar, pero desde la Harley, siguen cosas impresionantes. Bmw 1929 de carreras, Indians de la década del 40. Hasta llegar a una Harley-Davidson militar XA 1 prototipo, que fue la única de la marca americana en su historia, con cardán, en vez de cadena o correa de distribución.
El gobierno de Estados Unidos la pidió para utilizarla en la guerra frente a los nazis que utilizaban Bmw. Cómo dato llamativo, tenían el acelerador en la izquierda, para que el piloto pudiera sacar el rifle y disparar con la derecha. Con motor boxer de cilindros opuestos, solo se fabricaron 1000 de estas ya que no tuvieron el visto bueno para la fabricación con el nacimiento del gran Jeep Willys y su utilización en la Segunda Guerra Mundial. Hoy quedan 4 en el mundo, y solamente 2 en el estado de conservación que está la de la colección.
La historia de cada moto es impresionante y sobre todo muy particular. Cómo una Ariel (Marca británica fundada en 1902) que era utilizada por los carteros británicos. Su particularidad era una luz que salía desde arriba del tanque, para que los mismos puedan leer los sobres y las direcciones en horas de poca luz.
Mondial campeona del Giro de Italia, Triumph Bonneville 1960, Bmw R20S. Esta última fabricada en 1974 comenzó a formar la señal deportiva de la marca alemana con un nuevo diseño de pintura y sus 900cc. Una Kawasaki 750 cc tres cilindros, de 2 tiempos. Le tuvieron que poner un amortiguador a la dirección para que al acelerar, no se moviera tanto la rueda delantera de lo violenta que era. Entre muchas otras más, como ediciones especiales por los 100 años de Harley-Davidson, o una Kawasaki kz1000 Z1-R, una de las primeras super motos, cerramos nuestra primera colección.
La colección de motos de Brad Pitt
La segunda colección en la que nos vamos a detener pertenece al actor Brad Pitt. “Cuando manejo con el casco puesto soy invisible”. El estadounidense no es un amante y coleccionista de motos cualquiera. No solamente tiene una selección de motos increíbles, sino que las maneja en su día a día para transportarse hasta el set de grabación.
Arrancamos tranquilos, una de las motos con la que se vio al actor paseando por las calles de Los Ángeles, fue una BMW con un sidecar, producida durante la Segunda Guerra Mundial, por la que pagó más de 350.000 dólares. Si, aproximadamente el equivalente a 8 BMW R1150GS Adventure. Moto en la que también se lo vió llevando a sus hijos por las calles.
Como todo buen estadounidense de nacimiento, se lo vio arriba de varias Harley-Davidson, la mayoría tuneadas a su gusto. Una fue diseñada por Roland Sands, uno de los grandes en el rubro. O en otras más deportivas, como Ducati Monster 696 y una Ducati Desmosedici RR.
Dentro de su fanatismo y amor por las dos ruedas, existe un apartado más especial que cualquiera. El exmarido de Angelina Jolie, posee un Ecosse FE Ti XX. Una moto hecha de titanio y fibra de carbono, con un bicilíndrico en V de 2400cc, que entrega 250 CV. Solamente se fabricaron 13 de estos ejemplares. 300.000 dólares fue el precio que pagó el actor, por hacerse con esta máquina. Claramente considerada la moto más cara del mundo por allá en 2012.
Los fanáticos son buenos para el mundo, ayudan a que apasionados como nosotros, disfrutemos de su locura como si fuera nuestro dinero el que estamos invirtiendo. Poreso gracias a todos los coleccionistas, esperemos que existan muchos más. (todo esto se puede eliminar)