Opinión: esta moto trail usada es una gran opción si no querés gastar una fortuna
Analizamos sus puntos más fuertes en comparación con algunas motos actuales.
Me topé en redes con una moto trail usada que me sorprendió un poco por su precio y, más aún, por lo vigente que está su equipamiento con respecto a modelos actuales nuevos.
Estoy hablando de una BMW G 650 GS 2010 (no confundir con la F 650 GS), con 35.000 kilómetros, que se podía conseguir por menos de 10.000 dólares. Un valor cercano al de modelos del segmento de moda (entre 400 y 500 cc), con una potencia similar, pero con una trayectoria bien establecida, a diferencia de muchas de estas motos que son tan nuevas.
Como siempre en las notas de opinión, tengo que aclarar que, justamente, este es solo un punto de vista. Nosotros solemos analizar modelos nuevos, pero hay un mercado realmente gigante de motos usadas que -como en este caso- son de un perfil premium y que podrían convertirse en una opción más que válida para aquel que está buscando su próxima compañera de ruta.
Dicho esto, la BMW G 650 GS 2010 se perfila como una moto trail confiable, económica y muy disfrutable. A pesar de sus años, conserva rasgos que la vuelven aún competitiva frente a rivales más modernas. Un análisis de lo que podés esperar en ruta y off-road.
Una moto trail con un motor confiable y probado: consumo y autonomía
Pocas motos sorprenden tanto en economía como esta monocilíndrica de 652 cc. Según algunos registros de la época, a 90 km/h promedia unos 31 km/l, y subiendo a 125 km/h llega a 34 km/l. Son cifras que ni una naked de 300 cc actual se anima a igualar. Traducido a dinero, significa kilómetros y kilómetros sin parar en la estación de servicio; ideal para quienes disfrutan de largas rutas o escapadas mixtas.
Además, su tanque (que, como curiosidad, está bajo el asiento) optimiza el centro de gravedad y no compromete capacidad: con casi 15 litros reales de combustible, las distancias entre cargas se estiran hasta los 500 kilómetros.
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Con 47 CV de potencia máxima (frente a los 40 CV de la Himalayan o los 45 de la CFMoto 450MT), la G 650 GS deja en claro que su monocilíndrico es sencillo pero muy efectivo. Su configuración «sin extras» -inyección electrónica, refrigeración líquida y doble árbol de levas- le otorga robustez y bajo mantenimiento. Igual, de esta moto trail se vendieron más de 100.000 unidades en todo el mundo, por lo que, si pensás que los repuestos pueden ser un problema, olvídate de eso.
Entre otros datos, los 78 cm de altura de asiento la hacen amigable para pilotos de todas las tallas, y sus 165 mm de recorrido de suspensión absorben con solvencia caminos rotos o senderos de tierra. Con 175 kg en seco, es liviana en comparación con muchas 650, lo que se traduce en agilidad y diversión tanto en curvas como en tramos lentos.
Peca en equipamiento, pero no tanto en seguridad
No podés pedirle a una trail 2010 lo último en electrónica, pero la G 650 GS cumple donde importa: freno delantero de 300 mm y trasero de 220 mm, ambos con pinzas Brembo, respaldados por ABS de doble canal. El equipo cumple de sobra en asfalto y tierra firme; registra bien el frenado y evita bloqueos. Obviamente no tiene control de tracción ni modos de conducción, pero su filosofía «menos es más» prioriza sistemas confiables y fáciles de mantener. Para una moto de más de una década, el balance entre prestaciones y seguridad es más que digno.
Para su precio y antigüedad, viene muy bien equipada: lo más destacado son los puños calefaccionados de fábrica, integrados sin cables ni botones a la vista. Pueden parecer un lujo prescindible, pero cambian por completo la experiencia en mañanas frías o rutas de altura. El resto del equipamiento es sobrio: protección mínima off-road, pero suficiente para trasladarse sin dramas del asfalto a la tierra. Si buscás algo más extremo, existe el kit Sertão, pero tal como sale de fábrica, la G 650 GS ya te da versatilidad y confort suficiente para viajes mixtos.
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Precio y relación valor-prestaciones de esta moto trail
Encontrar una moto trail de 650 cc con 35.000 km por debajo de 10.000 dólares en 2025 es, a mi entender, una apuesta bastante lógica para aquellos que quieren una moto trail sin invertir en las nuevas 450 cc «de moda» o que, simplemente, les da igual la electrónica excesiva.
La BMW G 650 GS 2010 no es la moto trail más moderna del mercado, pero sí una de las más equilibradas para quien busca economía, facilidad de uso y versatilidad. Es un modelo que rinde en consumo, mantiene la seguridad justa y ofrece equipamiento práctico. Ideal para pilotos que quieran iniciarse en aventuras, como el paso previo a una trail «grande». En definitiva, una compañera de ruta que, con sus virtudes sencillas y precios competitivos, sigue vigente.