noticias |

¡No podemos seguir así! Hagan algo, manga de…

#OPINIÓN | La realidad que nos afecta está fuera de control ¿Alguien nos protege? ¿Qué podemos hacer? | Por Nicolás Peritore

Completen el título como quieran. Desde ineptos hasta corruptos, se me vienen a la mente decenas de calificativos para describir a los funcionarios que permiten y/o hacen la vista gorda con lo que está pasando en rutas y accesos y que nos tiene a nosotros, los motociclistas, como víctimas.

El robo violento de motos no es nuevo, y hace mucho tiempo que es un tema a solucionar en muchas de las grandes ciudades latinoamericanas. Pero lo que se está viendo actualmente en Acceso Norte (Panamericana), Acceso Oeste, Autopista Ezeiza – Cañuelas, por solo nombrar los casos “emblema”, es de un nivel de impunidad y violencia pocas veces visto. Todos los lunes, después de un fin de semana soleado e ideal para motear, es impresionante la cantidad de posteos en redes sociales que se publican con fotos de motos robadas, y donde sus dueños relatan lo ocurrido y piden colaboración para encontrar la moto en cuestión.

Motochorros en Argentina

Montados sobre motos de alta cilindrada (previamente robadas, claro), “las lacras” persiguen, amenazan con armas de fuego y roban a los motociclistas que circulan por estos accesos, como así también por las rutas 8, 9, 6, 7, etc.

Ya no se trata de robar motos con fines delictivos, como por ejemplo Honda XR250 Tornado o similares que, por sus características, son excelentes “herramientas de trabajo” para estos delincuentes. Ahora, además de robarles las cub, street y utilitarias a los desamparados chicos que trabajan para las aplicaciones de envío a domicilio (que hasta han optado por ir con acompañante para sentirse más protegidos), han incorporado también el robo de motos de media y alta gama. Todos de manera violenta y donde tenemos que dar gracias si podemos volver sanos y salvos a nuestros hogares, pero en un Uber, porque ya no tenemos la moto que, con tanto trabajo y sacrificio compramos.

Motochorros en Argentina

revista lamoto digital

“Nico, tenés que saberte robado” me dijo un amigo (con el que comparto salidas y viajes en moto) en una reciente charla de WhatsApp y donde debatíamos del tema, pero la verdad, me niego a “normalizar” esto también. Es que entregarles la moto no basta, porque además de robarte casco, campera y guantes, a más de un motociclista le han pegado un tiro solo por diversión. A la indumentaria necesaria e imprescindible que llevamos los motociclistas para protegernos en caso de un accidente, ¿le vamos a tener que agregar un chaleco antibalas?

El Marketplace de Facebook es un shopping de motos y motopartes robadas, todos lo sabemos. Las cuentas de Instagram y Facebook de “motos crudas” retratan todo el tiempo a estas “lacras” ostentando, de manera obscena, motos que han robado y que vaya uno a saber con qué final para el dueño original. Las unidades de “cibercrimen”, ¿no saben de esto?

Motochorros en Argentina

Evidentemente esta problemática, que tiene a los delincuentes y a distintos escalafones de funcionarios como “socios”, no es tan visible como disfrazar a los motociclistas de bien con inútiles chalecos con la patente en sus espaldas, “solución” para los mal llamados “motochorros” que se ha comprobado ineficiente en cuanta ciudad de Latinoamérica se ha implementado. Pero bueno, esa es otra discusión que merece una columna aparte.

Llama la atención como a ninguno de los “cráneos” que nos gobierna o que tenga aspiraciones para hacerlo, no se les cae una idea y hace algo al respecto. “Comprame mi voto” con seguridad, educación y salud, y no con distintos artilugios conocidos del clientelismo político. Es increíble pero real, tenemos que pedir cuestiones que son básicas en cualquier país serio y responsable. ¿Hay que esperar que la próxima víctima sea un político/funcionario o hijos de ellos para que alguien tome cartas en el asunto?

Motochorros en Argentina

Desconozco cuál es la solución, y tampoco es mi función encontrarla. Desde mi lugar, creo que localizar puestos de control y retenes es una manera sencilla y efectiva para identificar y detener a estos delincuentes. Ninguno de ellos es propietario legítimo de esas motos, ni tiene una cédula azul que lo habilite a circular con ellas. Por lo demás, los motociclistas de bien, no vamos a tener ningún problema en que nos paren las veces que sean necesarias para mostrar toda nuestra documentación, si el objetivo es terminar con esta ola de robos.

Por nuestra parte, por favor no compremos repuestos, accesorios o indumentaria de origen dudoso. No alimentemos el negocio de esta “gente”. Es una forma de cuidarnos entre todos. Así mismo y mientras dure esta locura, salgan en grupo y con los ojos bien abiertos. Eviten, en lo posible, las zonas más picantes y circular de noche. Estas “lacras” están entre nosotros, vestidos de motociclistas y arriba de cualquier tipo de motos, muchas veces más caras y veloces que las nuestras.

Motochorros en Argentina acceso oeste

La verdad es que me pareció una obligación que nos hagamos eco de esto que nos está pasando. Por favor no normalicemos esta situación. Hagámosla pública desde los medios de comunicación, las redes sociales y el boca en boca. Cuídense mucho y buenas rutas.

Crédito fotos: web y Youtube (Bikelife motoblogs y Callejero motoblog)