La Honda Transalp cada vez más cerca: ¿este podría ser su precio?

La Honda XL750 Transalp es uno de los lanzamientos más esperados del año, ya que su llegada al mercado local está pautada para la segunda mitad de 2025. Ahora, arribó a un mercado muy cercano y a un precio llamativo. Te contamos todos los detalles.

La moto trail mediana de Honda ya está disponible en formato preventa en el mercado uruguayo, un país en el que la marca del ala comparte muchos de los modelos que se venden en nuestra tierra, con precios bastante similares también, por lo que podría ser interesante la información que llegue del otro lado del Río de la Plata.

Cuánto podría salir la Honda Transalp

En Uruguay, el precio de preventa de la Transalp es de 21.900 dólares. Si intentamos plantear un paralelismo con nuestro mercado, la Honda XR300 Tornado cuesta 8.600 dólares y en el país vecino 9.900 dólares, es decir, una diferencia del 15%. En el hipotético caso de que se mantenga esa relación, la Honda podría llegar a nuestro mercado a un valor cercano a los 18.800 dólares, aproximadamente.

Con ese precio, la Honda quedaría muy competitiva en el segmento trail liviano, donde, por ejemplo, la Yamaha Ténéré 700 supera los 20.000 dólares. Aunque para confirmar esto resta esperar un poco más.

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Cabe recordar que la Honda XL750 Transalp, además de Uruguay, ya se vende en mercados cercanos como el chileno y, hace algunas semanas, fue anunciada para Brasil.

Otro detalle a tener en cuenta es que, en el Gran Premio de la República Argentina de MotoGP, donde la trail de Honda fue anunciada, se mostró la versión 2024 del modelo, siendo en realidad la última actualización la que finalmente se comercializará, según se rumorea.

Cómo es la versión 2025 de la Honda XL750 Transalp

La moto trail de la casa del ala dorada se mueve gracias a un motor bicilíndrico en paralelo de 755 cc que proporciona una potencia de 92 CV y un torque máximo de 75 Nm. Este bloque es el mismo que lleva la CB750 Hornet, con ocho válvulas, tecnología Unicam y refrigeración líquida. Con esa cifra, se coloca como una de las más potentes de su categoría.

La fábrica anticipa que este modelo consume solamente 4,3 litros de combustible cada 100 kilómetros, por lo que, con su tanque de 16,9 litros, roza los 400 kilómetros de autonomía, en teoría.

La electrónica que acompaña a ese motor es uno de los puntos que renovó Honda, comenzando con el acelerador electrónico Throttle By Wire (TBW), que ahora interviene en búsqueda del confort, con cinco modos de conducción que incluyen: Sport, Standard, Rain, Gravel y User. Este último modo tiene la particularidad de ser totalmente personalizable, permitiendo ajustar parámetros como la potencia del motor, el freno motor y el control de tracción.

En su parte de ciclo, el chasis de acero tipo diamante está acompañado por una suspensión Showa de 43 mm, con horquilla invertida SFF-CA en la parte delantera y amortiguador trasero Pro-Link ajustable. En la misma línea que su electrónica, la suspensión fue revisada para mejorar la absorción de impactos en terrenos irregulares y, de esa manera, optimizar el confort de marcha del modelo.

Sus llantas de aluminio con rayos de acero inoxidable siguen siendo de 21 y 19 pulgadas, respectivamente. Dependiendo de la versión, puede llevar neumáticos Metzeler Karoo Street o Dunlop Mixtour, ambos con cámara.

En cuanto a sus frenos, utiliza dos discos de 310 mm adelante y un disco trasero de 256 mm. Obviamente, equipa sistema ABS de serie. Además, incluye un indicador de frenada de emergencia (ESS), que activa las luces de emergencia en reducciones de velocidad bruscas; esta tecnología sirve como una alerta para los vehículos que transitan cerca de la moto.