Un requisito inédito para probar una de las motos eléctricas más avanzadas (y caras)
Para probar la nueva y avanzada Arc Vector, el fabricante pide un requisito tan inédito como increíble. En caso de cumplir, ¿accederías?
Hay motos de todo tipo. Deportivas, para viajar, para todos los días, más caras, otras más baratas… y después de todas esas está la impresionante Arc Vector, un derroche de tecnología hecho moto eléctrica con capacidades no tan espectaculares para la actualidad pero que sin duda están muy por encima de la media.
Una moto como esta, que no se fabrica de forma masiva por lo lujosa y extravagante, tiene su elevado precio al que sólo pocos pueden acceder, y justamente por eso es que la empresa fijó un requisito especial para acceder únicamente a un test ride: quienes quieran probar la moto deben demostrar que tienen capacidad económica para comprar una. En pocas palabras, si no sos millonario, «alpiste perdiste».
La Arc Vector es una de las motos eléctricas presentadas por primera vez en el EICMA en 2018 e inmediatamente se convirtió en una de las más extravagantes y caras del segmento, que traía soluciones innovadoras. Anunciada con una velocidad máxima de 200 km/h y una autonomía de 436 km, atrajo la atención de todos. Y ya se puede probar oficialmente.
Índice
Arc Vector: motor, potencia y autonomía
Técnicamente hablando, puede que no te sorprendan las capacidades de esta moto. Tiene 118 CV de potencia (87 kW) y entrega 173 Nm de par, que le permiten hacer el 0-100 km/h en 3,1 segundos, algo que una moto a combustión, sin necesidad de ser de las más exageradamente deportivas, puede superar sin problemas. Pero la gracias de la Arc Vector es la exclusividad que permite su personalización específica para cada cliente.
Cada unidad de este modelo se hace a medida para cada cliente y se puede personalizar hasta el punto de que sea única en el mundo. Arc Vector mantiene su chasis monocasco de alta calidad, piezas de carbono y eje delantero con buje de dirección. Arc considera que la integración de la batería en el cuadro es una ventaja de rendimiento, ya que brinda una experiencia dinámica que otras motos eléctricas no.
Características premium
Además, todo el rendimiento se corona con firmas de primer nivel que entregó sus mejores componentes tanto para suspensiones como frenos. Por ejemplo, Öhlins firma el monoamortiguador TXT utilizado en cada rueda y Brembo se hace presente en la Arc Vector con sus pinzas Stylema para ambos frenos (doble disco de 320 mm delante y pinzas monobloque de 4 pistones junto con disco de 240 mm y pinzas de 2 pistones detrás).
Cada una de las motos eléctricas se personalizará para adaptarse a su propietario, con soportes mecanizados por CNC para las barras y clavijas hechas según las preferencias de cada piloto, y además recibirá una campera con tecnología háptica y un casco de alta tecnología de regalo disponible con HUD (Head-up Display), un sistema similar al de los cascos de pilotos aéreos de combate.
La cámara trasera integral del casco se puede mostrar a través del HUD y se activa automáticamente cuando detecta algo en su punto ciego. Además, presenta diferentes modos de visualización seleccionables a través de un botón en la moto o por voz, ya que tiene instalada una conexión inalámbrica.
Precio y requisito inédito
Todo suena muy bien, pero quizás sea algo insuficiente para los 128.000 dólares que cuesta la versión básica de esta Arc Vector. Con ese presupuesto no resulta difícil encontrar una deportiva que le haga frente. Aunque el hecho de que permita personalizar la compra a gusto de cada uno es un condimento extra que atrae a muchos clientes.
Para acceder a su prueba, Arc requiere acceso a la cuenta bancaria del interesado junto con un registro de antecedentes policiales, no sólo para revisar que cuenta con el presupuesto para comprar sino que también para asegurar que entrega una moto a manos confiables. ¿Accederías a un test ride con estos requisitos?
Nació en 1997 en Capital Federal. Creció en el barrio porteño de Villa del Parque, y desde chico le gustó manejar. Estudió y se recibió de Periodista Deportivo en DeporTEA, donde egresó en diciembre de 2019. Desde entonces se dedicó a cubrir diversos deportes hasta que en junio del 2020 llegó a MotorPress. Actualmente es redactor en La Moto.