¿Vuelve una deportiva muy querida de Yamaha? La moto icónica que podría regresar al mercado
Yamaha dio señales de esperanza a los usuarios que añoran volver a conducir este modelo en las calles. Qué se sabe sobre su regreso.

La Yamaha R1 podría regresar a los concesionarios de Europa, tras haber desaparecido como modelo de calle a causa de haber quedado fuera de la normativa Euro5+. Te contamos los detalles sobre esta moto deportiva.
Esta posible fue señalada por Clément Villet, Director de Movilidad Terrestre de Yamaha Europa, en una entrevista brindada al medio MCN. Sus palabras no solo reavivan la esperanza de quienes añoran a la emblemática deportiva, sino que apuntan a un escenario en el que la marca estaría considerando un retorno que iría mucho más allá de una simple actualización normativa.
No te pierdas nada del mercado de las motos → Seguinos en Google!
¿Vuelve la Yamaha R1?
«Simplemente volver con la R1 actual y la homologación Euro5+ no es suficiente. Necesitamos traer algo nuevo que, en mi opinión, debería ofrecer un paso adelante en prestaciones, manejo y todo lo relacionado con la competición.», aseguró quien es uno de los responsables más influyentes dentro de la firma japonesa en le caso de concretarse este regreso.

La Yamaha R1 fue, desde finales de los noventa, un símbolo de lo que una deportiva de litro puede llegar a ser. Potencia, carácter y una presencia que la situó siempre entre las referencias del segmento. Sin embargo, el mercado cambió. El auge de las naked de corte deportivo, más versátiles y adaptadas al día a día, desplazó a las superbike a un nicho más reducido y especializado.
La llegada de la normativa Euro5+ terminó de rematar el panorama: desde su entrada en vigor, la R1 desapareció de los concesionarios en su versión homologada para calle, quedando restringida a circuitos, tandas y competición desde 2024.
Ese vacío fue especialmente significativo en un modelo que, durante décadas, se enfrentó a rivales históricos dentro y fuera de los trazados. Pero parece que la tendencia podría empezar a invertirse. Las marcas están recuperando el interés por las deportivas, inicialmente desde la media cilindrada. El avance de las motos chinas y las renovaciones de superbike anunciadas por Kawasaki o Suzuki este mismo año lo confirman, mientras BMW, Ducati y Honda siguen con su apuesta por este tipo de máquinas. Y, Yamaha no escapa a esta tendencia.
La moto que Yamaha dejará de fabricar en 2026: tiene el mismo motor que la Ténéré y diseño único
¿Cuándo podría regresar la Yamaha R1?

Lo concreto es que la ansiedad en los usuarios que esperan esta moto debe ser contenida. Villet reconoció que están reevaluando la dirección a seguir, un proceso que podría alargarse antes de tomar una decisión definitiva.
«Ahora estamos reevaluando qué hacer, así que veremos qué llega en términos de una máquina homologada para carretera. Por ahora, necesitamos tiempo. Si volvemos, queremos asegurarnos de que lo hacemos bien», explicó el directivo de la marca de los diapasones.
Esto significa que, aunque la puerta al regreso de la R1 está abierta, su vuelta no sería inmediata. Yamaha parece decidida a evitar un lanzamiento precipitado. Prefieren tomarse el tiempo necesario para diseñar una máquina que no solo cumpla con la normativa vigente, sino que mantenga vivo el legado de una de las superbike más influyentes de la era moderna.
¿Cómo fue la última R1 de Yamaha vendida en Europa?

La última Yamaha R1 homologada para calle, comercializada entre 2020 y 2024, fue la heredera directa de una saga que siempre destacó por su combinación de potencia y tecnología. A nivel mecánico, recurría a un motor de cuatro tiempos y cuatro cilindros en línea de 998 cc con distribución DOHC y culata de cuatro válvulas por cilindro, un conjunto diseñado para ofrecer un carácter plenamente deportivo.
Con inyección electrónica, refrigeración líquida y una compresión de 13:1, esta generación entregaba 200 CV a 13.500 rpm y 113,3 Nm a 11.500 rpm, cifras que la situaban entre las superbike más prestacionales de su categoría bajo la normativa Euro5.
Su parte ciclo apostaba por un chasis Deltabox V de aluminio acompañado por una horquilla invertida Kayaba de 43 mm, regulable en compresión, extensión y precarga, con la particularidad de permitir ajustes diferenciados entre ambas barras. Detrás, Yamaha confiaba en un basculante de doble brazo también en aluminio y un monoamortiguador progresivo con botella de gas separada, igualmente regulable.

El equipo de frenos estaba a la altura de sus aspiraciones: dos discos delanteros de 320 mm mordidos por pinzas radiales Monobloc de seis pistones y un disco trasero de 220 mm con pinza de doble pistón, un conjunto pensado para transmitir precisión y confianza incluso en conducción extrema.
En cuanto a dimensiones, la Yamaha R1 mantenía unas proporciones compactas, con 2.055 mm de largo, 690 mm de ancho y 1.165 mm de alto, una distancia entre ejes de 1.405 mm y un asiento situado a 855 mm del suelo. Con un peso en seco de 201 kilos y un depósito de 17 litros, su ergonomía estaba claramente orientada al rendimiento. Montaba llantas de 17 pulgadas en aluminio con neumáticos Bridgestone Battlax RS11 en medidas 120/70 delante y 190/55 detrás, una elección enfocada a maximizar el agarre en condiciones deportivas.
Tecnología
La electrónica completaba un conjunto avanzado para su época. La instrumentación incluía ordenador de a bordo, indicador de marcha engranada, cronómetro, luz de sobrerrégimen, lectura de temperaturas y conectividad con smartphones. El paquete de asistencias contaba con control de tracción, modos de motor configurables, selector de intervención del ABS y del propio control de tracción, un equipamiento que permitía adaptar el comportamiento de la moto a distintos escenarios.
A ello se sumaban elementos de confort como arranque eléctrico, inmovilizador, regulaciones en manetas y amortiguador de dirección, configurando una superbike pensada tanto para la precisión en circuito como para ofrecer una experiencia lo más completa posible dentro de los límites normativos de su época.



