Yamaha trabaja en una especial moto deportiva: estos son algunos de sus detalles

Yamaha busca constantemente innovar con sus modelos, algo que se ha convertido en todo un sello de la propia marca. Es por ello que procuran estar a la vanguardia de los avances tecnológicos, algo que ha quedado al descubierto con la filtración de uno de sus trabajos.

Es que la firma nipona está en pleno desarrollo de una moto deportiva eléctrica de altas prestaciones. Los pedidos de homologación que han trascendido evidencias gran parte de los detalles que tendrá, al menos en lo que a cuestiones más estéticas respectan. A continuación, repasaremos todo lo que se aprecia en ellos.

Yamaha trabaja en una moto deportiva eléctrica: esto se sabe

Según lo que se desprende de los planos, la moto presenta un motor eléctrico, junto a un paquete de baterías de altas prestaciones dispuestas en el lugar donde debiera ir el motor de los vehículos a combustión, una ubicación que es posible por la ausencia de radiador. El sistema de transmisión es por cadena y corona, llevando el movimiento a la rueda trasera. Un detalle interesante es que el impulsor no está refrigerado por líquido, como es usual entre los de su clase, sino por aire.

Un chasis de dos piezas encierra a este propulsor. Más específicamente su bastidor tubular superior, que es de acero, resistente y bien dimensionado. Detrás impera un basculante reforzado con un monoamortiguador dispuesto de forma prácticamente horizontal, mientras que adelante destaca una horquilla invertida a la que se suman dos pinzas de anclaje radial aunadas a los respectivos discos (doble adelante y simple atrás).

Finalmente, un apartado no menor es el del puerto de carga. El inversor que convierte la electricidad está situado en la parte baja de la moto, mientras que el canal para reabastecer de energía al vehículo está debajo del asiento.

Yamaha deportiva eléctrica: los detalles que restan

Como hemos adelantado desde un comienzo, son las prestaciones técnicas las que se mantienen en el más profundo de los secretos. Entre los datos que aún no se tienen está la potencia del motor; la autonomía de la batería; la velocidad de carga; la ergonomía; las variantes que tendrá; la fecha estimada de lanzamiento o el precio.

Tampoco se sabe nada respecto a quién firmará las suspensiones, frenos, llantas o neumáticos, así como del apartado tecnológico en su conjunto, aunque debería integrar la mayoría de las herramientas que Yamaha viene implementando en sus modelos.

Finalmente, de la mano con la ausencia de una fecha de lanzamiento, tampoco podemos precisar en qué mercados estará disponible primero. Sin embargo, algo es seguro. Los japoneses pretenden con esto seguir a la cabeza de la nueva ola de motos eléctricas.