Yamaha Towny, la moto que era solo «para hombres»
Yamaha marcó un antes y un después con el lanzamiento de una moto muy especial y destinada solo para hombres
En el cambiante mundo de la industria de las motocicletas, Yamaha siempre ha sido un jugador audaz, dispuesto a desafiar las expectativas y a explorar nuevos territorios en el diseño y la comercialización de sus productos. Sin embargo, a lo largo de su historia ha tomado decisiones comerciales que, en retrospectiva, podrían considerarse, como mínimo, polémicas. Un claro ejemplo fue la introducción de la moto solo para mujeres, razón por la que hoy sorprende con otra creación.
La verdadera historia de Yamaha no se limita a un solo revés. En un giro inesperado, 15 años después de su intento fallido con la moto exclusivamente femenina, decidió volver a desafiar las convenciones. Esta vez con una moto diseñada específicamente para el público masculino.
Una moto de Yamaha para hombres
En una época en la que la igualdad de género y la diversidad son valores fundamentales, la idea de crear una moto exclusivamente para hombres puede parecer, a primera vista, fuera de lugar. Sin embargo, para comprender completamente el contexto de esta iniciativa, es crucial retroceder en el tiempo y analizar el panorama sociocultural de la época.
En la década de 1980, Yamaha se encontraba en un momento de transición. La sociedad estaba experimentando cambios significativos en sus percepciones sobre el género y la identidad, y las marcas de todo el mundo se esforzaban por adaptarse a las nuevas realidades y (posibles) requerimientos. Fue en este contexto que la compañía lanzó al mercado la Towny, un modelo que estaba diseñado con una apariencia y características que apelaban específicamente al público masculino.
Asimismo, lo que distinguía a la Towny era su diseño robusto y su chasis espacioso, concebido para satisfacer a personas de constitución más grande. Con su motor de dos tiempos y su transmisión de dos velocidades, ofrecía un rendimiento sólido y una experiencia de conducción única. Además, su estética imponente y su estilo inconfundible la convertían en un verdadero símbolo de masculinidad en las carreteras.
¿Un éxito o un fracaso?
A pesar de su intento por capturar el mercado masculino, la Towny no logró alcanzar el mismo nivel de éxito que algunos de los otros modelos emblemáticos de Yamaha. Sin embargo, su legado perdura como un recordatorio de una era en la que las marcas estaban dispuestas a asumir riesgos y a desafiar las convenciones establecidas.
Hoy en día, la idea de una moto exclusivamente para hombres puede parecer anacrónica y desfasada, pero en su momento, la Towny fue un intento valiente de la firma nipona por adaptarse a las cambiantes dinámicas sociales y culturales.
Se trata, al fin y al cabo, de modelos que establecen un antes y un después debido a su impacto, el cual se explica en al menos tres aspectos:
- Estrategia de una compañía de pensar únicamente en un único género
- Un diseño especial, dado que se dirige a un público reducido
- Un modelo que queda en la historia como consecuencia del motivo por el que se fabrica y lanza
Al fin y al cabo, aunque el mundo ha evolucionado y las percepciones han cambiado, el espíritu innovador y pionero de Yamaha continúa impulsando a la firma hacia el futuro. Aun en el peor de los casos (es decir, que la nueva motocicleta resulte un fracaso) nada le quita el prestigio y, por sobre todas las cosas, la posibilidad de revertir lo sucedido con un nuevo modelo exitoso.
Nació en 1995 y los fierros son una de sus principales pasiones. Periodista, licenciado en comunicación y especialista en marketing digital, integra desde 2022 el staff de MotorDigitalPress y colabora con la estrategia de contenidos en www.autotest.com.ar, www.lamoto.com.ar y www.transportemundial.com.ar.