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La Yamaha más sencilla y récord a la vez: cuánto rinde y cómo

La Yamaha R3 es una moto deportiva que, aunque luce sencilla y hasta parece básica, batió récords que impactan al mundo. Velocidad máxima, tiempos de aceleración y cómo lo consiguió.

Cuando se oye o lee Yamaha R3, lo primero que se viene a la mente es una motocicleta accesible, ideal para quienes buscan entrar al mundo de las deportivas sin complicaciones. Sin embargo, esta moto sencilla rompe todas las expectativas al romper récords gracias al trabajo de TTS Performance. 

Yamaha R3, la moto sencilla que bate los récords

La metamorfosis de la Yamaha R3

La Yamaha R3, con su motor de 310 cc, fue transformada por TTS Performance, una empresa británica conocida por sus modificaciones extremas. Su objetivo es convertir esta deportiva A2 en un cohete sobre dos ruedas capaz de romper récords en el festival de Bonneville, que se celebra en las llanuras saladas de Utah.

La razón que explica por qué o cómo se consigue esto último es un sistema de sobrealimentación desarrollado específicamente para la moto. Este kit, denominado Rotrex C15-16, fue configurado para potenciar al máximo el rendimiento de la R3 sin modificar su cilindrada. Se incluyeron pistones forjados personalizados de JE, Bielas Carrillo, árbol de levas de Norton Motorsports y un tratamiento criogénico especial al cigüeñal de serie.

Estas mejoras llevaron a la Yamaha R3 de sus modestos 41 CV originales a unos 78 a 14000 rpm, una cifra que la convierte en una de las motos A2 más potentes jamás vistas. No será una superdeportiva, pero sí una de las más deseadas para andar en distintos caminos.

R3

Récords en el desierto de sal

La Yamaha R3 modificada fue puesta a prueba en las exigentes condiciones del festival de Bonneville, donde las motocicletas buscan establecer marcas de velocidad en recorridos de una milla (1.6 km). Los resultados hablan por sí solos: cuatro récords registrados por la AMA (American Motorcyclist Association), con una velocidad máxima de 142,44 mph (229,23 km/h), y otros dos por la FIM para situar a este modelo en un lugar privilegiado.

Aunque no alcanzó los 240 km/h, esta pequeña deportiva demostró que, con las modificaciones adecuadas, puede competir en terrenos dominados por motos mucho más grandes y potentes.

Y eso no es todo. A pesar de sus logros, la Yamaha R3 sobrealimentada no pierde su esencia. Su chasis y ergonomía siguen siendo los de una moto ligera y manejable, ideales para quienes buscan equilibrio entre potencia y control. Eso sí, el rugido de su motor modificado y la explosiva entrega de potencia la convierten en una experiencia completamente distinta.

Una Yamaha R3 en accion

Una moto sencilla que hace historia

Esta versión de la Yamaha R3 demuestra que, con ingenio y dedicación, hasta las motos más humildes pueden alcanzar grandes logros. En este caso, un sistema de sobrealimentación y ajustes de alto rendimiento transformaron una moto urbana en un ícono de la velocidad.

Asimismo, lo curioso es cómo luce esta R3 a simple vista e incluso lo que se piensa al oír o leer que se la menciona. Por eso, TTS Performances es un claro ejemplo de innovación e inspiración para los amantes de las dos ruedas.