Suzuki le dice no a las eléctricas y avanza con esta moto: estos son sus detalles
Suzuki avanza con la fabricación de una moto que tiene fuente de energía alternativa, aunque no se trata de una eléctrica. Estos son los últimos detalles revelados.
Suzuki se destaca entre los fabricantes de motos por su constante innovación, buscando siempre estar a la vanguardia de las novedades en ese mercado. Es por ello que busca aferrarse a una de las más revolucionarias del momento. Una en la que también reclaman su porción Kawasaki, Yamaha y Honda.
Nos referimos a las motos que tienen como fuente de energía el hidrógeno. Bajaj ya había dado la nota en la alimentación alternativa, con la Freedom a GNC, aunque desde Japón buscan subir la apuesta. Ya habíamos visto a fines de julio la H2-SX que Kawasaki presentó en las 8 Horas de Suzuka 2024, mientras que ahora ha sido el turno de Suzuki de estar en la lupa, tras la filtración de patentes para un modelo que funciona con el elemento más abundante del universo.
¿Una Suzuki que funciona con hidrógeno?
En octubre la firma asiática ya había revelado su prototipo de moto alimentada por hidrógeno, aunque ha sido en el comienzo de agosto de este 2024 cuando más características se han dado a conocer. En las solicitudes de homologación destaca la solución a un detalle que había sido problemático en aquella versión preliminar: el tamaño.
Es que el intrincado sistema de combustión precisa de un espacio considerable, algo que terminó repercutiendo en su distancia entre ejes, la cual quedó bastante larga. Cabe destacar que para este proceso, se necesita colocar un cilindro de hidrógeno en la parte baja del chasis, el cual han situado delante del motor y transmisión tomados de la Burgman 400. Esto busca evitarlo la nueva patente, ya que termina desplazando el tren motriz y el basculante hacia atrás.
¿Qué solución encontraron? En lugar de un único cilindro, decidieron implementar dos más pequeños. Uno de ellos ocupa el lugar original, aunque inclinado hacia arriba para no demandar una distancia entre ejes más amplia; mientras que el otro se dispone debajo de la parte trasera del asiento, acompañando el ángulo del mismo.
El hidrógeno como fuente de energía: más de un desafío para afrontar
Párrafo aparte de este vericueto mayúsculo, lo cierto es que hay también otras cuestiones que deben contemplarse. Para empezar, el tanque de hidrógeno requiere de características muy precisas: mientras que el de gasolina puede ser de plástico liviano, acero o aluminio (así como de diferentes tamaños); el del elemento más abundante del universo tiene que ser lo suficientemente fuerte para soportar 10.000 psi de presión.
Otro tema es la eficiencia de este químico como combustible. El hidrógeno es mucho menos denso que los hidrocarburos líquidos, por lo que aportarán menos energía aún cuando requieren la misma cantidad de espacio. Además, se debe tener cuidado con el radiador, el cual debe estar aislado del tanque de hidrógeno delantero y con una suerte de deflector para re-orientar el aire caliente evitándose así que entre en contacto con el hidrógeno.
Desde luego que el motor también debe atravesar sendos cambios para poder funcionar con la energía proveniente de esa fuente alternativa. La solución más difundida es la inyección directa de hidrógeno a la cámara de combustión luego de que las válvulas de admisión se hayan cerrado. Queda aún mucho por desarrollar en este ámbito, aunque resultados satisfactorios podrían significar una auténtica revolución.
Periodista deportivo. Egresado de la Escuela del Círculo de Periodistas Deportivos, en 2018. Empezó a trabajar ese mismo año en Diario Clarín, para luego pasar por las redacciones de Vía País y Fútbol Sites, donde ocupó cargos que iban desde la generación de contenido hasta sub-editor. En julio de 2024 ingresó a Motorpress Argentina, escribiendo artículos para La Moto, una de sus publicaciones especializadas.