Características
En cuanto a diseño y líneas generales de la Guerrero GXR 250, estamos ante un producto que se aleja un poco de ese aspecto espartano típico del segmento y que ofrece una estética muy conseguida en cualquiera de sus dos posibles combinaciones de colores, roja o blanca.
El faro principal de la Guerrero GXR 250 ensaya formas modernas que le sientan muy bien, ofrece un poder lumínico correcto a cargo de una lámpara halógena y se encuentra enmarcado por una máscara con parte de la gráfica del modelo. Los intermitentes, por su parte, son de tecnología led con tulipa transparente y diseño minimalista.
Es una moto on-off muy alta. Los 950 mm de distancia asiento-suelo harán que solo los más “lungos” puedan pisar firmemente con ambos pies. Para los demás, un poco de pericia será suficiente para domarla en las detenciones.
Los detalles y la calidad general de la de la Guerrero GXR 250 también se ven reflejados en el instrumental, con un display digital de fácil y rápida lectura. Ofrece velocidad, odómetro total e indicador de marcha engranada. Adeuda tacómetro y medidor de nivel de combustible (solo ofrece un testigo de reserva). Acompañan en el conjunto los clásicos testigos luminosos y una muy útil toma USB para la carga del celu o el GPS durante el viaje.
El guardabarros elevado de la Guerrero GXR 250 luce aristas y vértices bien marcados, y posee un refuerzo superior que suma a la percepción de robustez. La misma impronta de robustez la brinda la horquilla invertida de gruesos barrales que se encuentran correctamente protegidos por unos deflectores plásticos.
A favor
Estética lograda
Caja de 6 marchas
Calidad general
En contra
Altura excesiva
Asiento poco mullido
Tanque de poca capacidad
El delgado tanque de combustible de “justitos” 9 litros, con tapa extraíble, diseño rasante y con cerradura se encuentra prácticamente oculto debajo de las tapas laterales y el largo asiento tipo enduro que permite moverse a gusto por sobre esta Guerrero GXR 250 . Tapizado en material antideslizante de correcta calidad, solo podemos reprocharle la falta de mullido (característica bastante propia de este tipo de motos).
Mecanizados en forma de diente de sierra son los pedalines para el piloto, que gracias a su correcto tamaño son aptos para conducir parados y con las botas adecuadas. Igual descripción para el pedal de freno trasero. Los estribos traseros son los clásicos estriados sin recubrimiento de goma.
El grupo motor de la Guerrero GXR 250 en su totalidad luce una sobria tonalidad negra, al igual que el colector de escape, silenciador y su respectivo protector, mientras que el chasis doble cuna de acero y el basculante están acabados en gris aluminio. Es para destacar el prolijo pase de cables y mangueras en un producto de estas características.
El colín de diseño minimalista posee además de los giros, su faro principal de tecnología led, asegurando así un gran poder lumínico. Incorpora también una generosa parrilla portaequipajes. De aspecto muy robusto es el ya mencionado y exclusivo basculante construido en aluminio que monta (no directamente) un monoshock regulable en la precarga del resorte.
Los comandos en las piñas de la Guerrero GXR 250 son correctos, de calidad promedio y no presentaron problemas durante la breve toma de contacto. Para los espejos, la marca eligió unos de forma pentagonal que no evidenciaron fallas de regulación para obtener una visibilidad decente.
La postura de conducción es descansada y la esperada en toda on-off: espalda erguida, bien adelantados, codos y rodillas a 90 grados. Un combo muy agradable para los desplazamientos diarios que solo se ve opacado por la falta de mullido del asiento y la elevada altura antes mencionada.
Ficha técnica
Tipo | Monocilíndrico, 4T |
Distribución | OHC, 2 válvulas |
Alimentación | Carburador |
Refrigeración | Mixta |
Diámetro x carrera | 67,0 x 65,0 mm |
Cilindrada | 250 cc |
Potencia declarada | 17,7 CV a 6.500 rpm |
Torque declarado | 1,75 kgm a 5.500 rpm |
Rel. de compresión | 9,2: 1 |
Encendido | Electrónico |
Arranque | Eléctrico |
Caja | 6 velocidades |
Embrague | Multidisco en baño de aceite con accionamiento manual |
Transmisión Final | Cadena |
Configuración | Simple cuna en tubos de acero |
Delantera | Horquilla telescópica hidráulica |
Recorrido | 170 mm |
Trasera | Monoamortiguador hidráulico |
Recorrido | n.d. |
Delantero | Disco, con pinza de doble pistón |
Trasero | Disco, con pinza de pistón simple |
Delantero | 3.0-21’’ |
Trasero | 120/90-18 |
Largo / ancho / alto | 2.190 / 800 / 1.440 mm |
Distancia entre ejes | 1.470 mm |
Altura del asiento | 950 mm |
Distancia del suelo | 285 mm |
Dep. de combustible | 8,8 litros |
Peso en orden de marcha | 150 kg |
Velocidad máxima | 115 km/h (estimada) |
Velocidad máxima
La velocidad final de la Guerrero GXR 250 está en torno a los 115 km/h, dependiendo por supuesto del viento y de la talla del piloto.
Motor
El motor es un monocilíndrico de 250 cc, 4 tiempos, 2 válvulas, carburado, encendido CDI, arranque eléctrico y refrigeración mixta aire/aceite. Los 17,7 CV que rinde se notan y empujan con decisión ante el primer llamado del puño derecho. De arranque rápido, el funcionamiento general es sereno haciéndose presente las vibraciones en lo alto del cuentavueltas.
La Guerrero GXR 250 se desenvuelve de manera muy ágil en el denso tráfico urbano y como yapa podemos encarar pozos, lomos, cunetas sin siquiera peinar el freno, todo gracias a las generosas y “morrudas” suspensiones con las que cuenta. Con respecto a los frenos, el disco delantero responde correctamente brindando seguridad en todo momento. Por su parte, el trasero resulto igualmente efectivo y de fácil dosificación para el manejo off-road.
El dato de consumo no lo declara la marca, pero es de alrededor de 4 litros para recorrer el centenar de kilómetros, superando los 200 km de autonomía. La caja de 6 velocidades de la Guerrero GXR 250 y su corto escalonamiento ofrecen fuerza siempre y prestaciones acordes a las intenciones de la moto, con un comando de accionamiento corto y preciso.
La suspensión y sus componentes, aunque no ofrecen la posibilidad de regulaciones avanzadas, cumplen de manera más que loable en casi cualquier ámbito. Los largos recorridos de suspensión y su altura libre al suelo nos darán la posibilidad de enfrentar cualquier camino con solvencia, donde los límites los pondrán los neumáticos. Podemos afirmar que difícilmente hará tope con el setting elegido por el fabricante. Tampoco será excesivo el hundimiento de horquilla en frenadas acusadas.
El sistema de freno monta un disco lobulado junto a una pinza de doble pistón. Como no podía ser de otra manera, la rueda delantera es de 21” montada sobre una llanta de aro negro mate y rayos cruzados. Por su parte, el freno posterior está confiado a un disco lobulado mordido por una pinza de pistón simple. El caucho trasero, montado en llanta de rayos de 18”, es de medida 120/80 con unos tacos más que interesantes.
Fotos






