Fecha: 22.08.24
Probamos la Yamaha FZ más tecnológica y equipada de todas
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La Yamaha FZ-X es el más reciente lanzamiento de la marca de los diapasones para nuestro mercado. Si sos de aquellos que prejuzgaste a esta moto por su apariencia, ya sea positiva o negativamente, te digo que no te quedes solo con la “tapa del libro” y te invito a ver este video donde te voy a mostrar algunas características que seguramente desconocías y nadie te contó.
Características
Quienes nos siguen de manera constante, saben que hace poquitos días estuvimos probando la versión 3.0 de la FZS-FI. Al devolverle la unidad a Yamaha Argentina, me comentan que tenían disponible una FZ-X para que me llevase, cosa que hice más de favor que por una real curiosidad ya que, siendo sincero, no me llamaba demasiado la atención subirme a otra FZ que solo se diferenciaba por tener otro tratamiento estético…..es decir, la misma moto pero con otro diseño.
Bueno, bastó con solo subirme para decirme a mí mismo y dentro del casco, sin que nadie me escuchara: “que salame que soy, nada que ver una cosa con otra”.
Es más, le pregunté a quién me dio la moto que quería que destacase de la FZ-X ya que pensé a priori que no iba a tener mucho para decir y a lo que me contestaron: “Nico, todo lo referente a conectividad”. Y claro, es lógico, es que esa es la gran incorporación respecto a la FZ convencional pero, si bien les voy a contar todo respecto a esa tecnología, les puedo adelantar que después de probarla algunos días las diferencias van mucho más allá de eso y hasta que acercan esta moto a otro tipo de usuarios y necesidades.
Como siempre, empecemos hablando un poco del diseño. Podríamos decir que esta es la interpretación de la tendencia Neo Retro, un segmento muy de moda por estos días, de Yamaha India para la baja cilindrada. El gusto por un diseño siempre digo que es muy subjetivo, personalmente prefiero aquellos diseños neo retro que apuntan a lo deportivo, aunque reconozco que con el correr de los días empecé a mirarla con otros ojos.
No comparte piezas de diseño con la FZS-FI salvo pavadas como el guardabarros trasero suspendido, los intermitentes halógenos o el diseño de las llantas y no mucho más. Como en toda moto que apela a lo clásico, es infaltable el faro principal redondo, en este caso de tecnología full LED con DRL y con un proyector central. El desempeño me sorprendió, siendo incluso más eficiente que el de la FZS-FI. Atrás, el faro también es específico de este modelo y de tecnología led, con acrílico rojo.
Después lo que se destaca tiene que ver con este nuevo guardabarros delantero, el tanque, de un tamaño voluminoso pero de forma más clásica y con una boca de llenado descentrada, y también el asiento, muy grande, de una sola pieza y niveles diferenciados, con un tapizado con los clásicos bastones.
Pero lo que más llama la atención y anima a darle otro tipo de uso a esta FZ tiene que ver con ciertos detalles “off road” como los neumáticos multipropósito, el chapón cubre cárter que es metálico o los fuelles de goma que protegen de la suciedad a los barrales de la horquilla. Por supuesto que no estamos ante una Ténéré ni nada que se le parezca, ya que no hay suspensiones, recorridos, y otras características como para que hablemos de una moto doble propósito, pero nada, permite bajar a la tierrita y hacer algunos caminitos sencillos y por qué no, divertirnos un rato.
Ahora me quiero referir un poco a ergonomía que, para mí es un aspecto clave en esta moto y que la convierte en una opción a tener en cuenta para pilotos altos, o bien aquellos que necesiten cubrir distancias más allá de lo cortito urbano y lo quieran hacer de manera más cómoda.
Esta Yamaha FZ-X y su triángulo ergonómico (asiento, estriberas, manillar), nada tienen que ver con la FZS-FI. Y acá se convalida un poco lo que les decía en un principio que esta moto es más que una FZ con otro diseño.
Ya la altura de asiento es otra, con 810 mm, 20 mm más q la FZ, pero sin que esto llegue a ser un problema para los pilotos de menor altura. Aunque sí es cierto que la zona delantera del asiento es más ancha, por lo que nos abre más de pierna y ya no llegamos de la misma manera al suelo. Pasa un poquito lo mismo con el tanque, que es bastante menos estrecho en la zona trasera por lo que al conducir la moto iremos con las piernas un poco más abiertas. Al principio me hizo un poco de ruido, después me acostumbré. Para terminar con el asiento, es muy cómodo y amplio para ambos ocupantes.
Segundo punto de la ergonomía tiene que ver con las estriberas, que están bastante más adelantadas que en la FZ, lo que redondea una postura casi de moto utilitaria con las rodillas a 90°, muy cómoda. Y por último, el manillar que, con una curvatura mucho más acusada logra una posición totalmente erguida y con los brazos algo flexionados.
En síntesis, una posición de manejo mucho más descansada, que permite pasar más tiempo de manera cómoda arriba de la moto y que se adapta muy bien a los pilotos más altos, todo un logro en una 150.
Hablemos un poquito de la tecnología y electrónica presente en esta Yamaha FZ-X pero, antes de entrar en lo referente a conectividad no me quiero olvidar de contarles que esta moto incorpora control de tracción, con posibilidad de desconexión total. Me preguntaran que tan necesario es en una moto 150 con este nivel de potencia, y les diría que tiene sentido si pensamos en pilotos sin experiencia o con muy poca y que están haciendo sus primeras armas arriba de una moto, evitándole sustos u algo mayor en el caso que les patine la rueda trasera. En esos casos, me parece que sirve y que agrega seguridad. Para los que no quieran esa asistencia, se puede desconectar mediante el botón ubicado en el instrumental, aunque tengan presente que al cortar el contacto se vuelve a activar por defecto.
Ahora sí, conozcamos la tecnología Y-Connect de Yamaha que permite vincular nuestro smatphone mediante bluetooth con la moto. Una vez descargada la aplicación Y-Connect, disponible para Android y IOS, creamos nuestro usuario y agregamos nuestra moto mediante el nro de chasis. Una vez hecho esto, que se hace de manera muy intuitiva sin necesidad de leer ningún instructivo, ya tenemos vinculada nuestra moto la cual descarga a la aplicación datos como los kilómetros, aceite de motor, voltaje de la batería y localización de la moto (incluso desde que día y hora está estacionada en esa ubicación).
Una vez que emprendemos la marcha comienza a registrar datos de consumo y nos guarda la hoja de ruta del recorrido, con información de tiempo, velocidad, régimen de vueltas promedio, temperatura, etc. Por otro lado, nos lista en un ranking de usuarios en el cual vamos escalando puestos de acuerdo a cuan ECO sea nuestro manejo y la cantidad de kilómetros que realizamos.
También tenemos en tiempo real un panel con un tacómetro, temperatura ambiente, y velocidad. Por otro lado disponemos de recomendaciones de mantenimiento como sí también de avisos si hubiese algo que esté funcionando mal.
Respecto a nuestro celu, todo lo que sean llamadas, mensajes, emails y hasta nivel de batería, se muestra con indicadores en el instrumental.
En fin una aplicación de registros muy completita y hasta que puede provocar una adicción sana con ese ranking de manejo ECO. Lo que sí es importante aclarar para que no preste a la confusión, esta aplicación no brinda ningún tipo de navegación.
Dicho todo esto y para terminar con el apartado de electrónica y tecnología, hay que destacar el nuevo instrumental LCD multifunción en negativo que gana en tamaño respecto a la Yamaha FZS-FI y de esta manera muestra la información de manera más clara y sencilla. Además de las notificaciones de nuestro celu que acabo de mencionar, muestra velocidad, tacómetro, nivel de combustible, odómetro total y 2 trips, hora y el indicador de manejo ECO. Una lástima que le falte el indicador de marcha engranada, con eso coronaría. Otra incorporación para una FZ es la toma de carga de 12V ubicada donde nos gusta, por debajo del instrumental.
La piña de comandos izquierda es completamente nueva, con un gatillo de passing convencional y un switch que nos permite decidir en qué modo funciona el faro principal: DRL o luz baja. Interruptor de balizas o luces de emergencia, no hay. Los espejos ofrecen buena visión.
No me quiero olvidar, el caballete central viene de serie, cosa que se agradece a la hora de estacionar en determinados lugares, como para el lavado y mantenimiento de la unidad.
A favor
Conectividad
Incursiones off-road
En contra
Tanque de menor capacidad
Sin ABS delantero
Ficha técnica
Tipo | Monocilíndrico, 4T |
Distribución | SOHC, 2 válvulas |
Alimentación | Inyección electrónica |
Refrigeración | Aire |
Diámetro x carrera | 57,3 x 57,9 mm |
Cilindrada | 149 cc |
Potencia declarada | 12,4 CV a 7.250 rpm |
Torque declarado | 13,3 Nm a 5.500 rpm |
Rel. de compresión | 9,6:1 |
Encendido | Electrónico |
Arranque | Eléctrico |
Caja | 5 velocidades |
Embrague | Multidisco en baño de aceite |
Transmisión Final | Cadena |
Configuración | Tipo diamante de acero |
Delantera | Horquilla telescópica de 41 mm |
Recorrido | 130 mm |
Trasera | Monoshock |
Recorrido | 120 mm |
Delantero | – |
Trasero | – |
Delantero | Disco de 282 mm, pinza 2 pistones. ABS |
Trasero | Disco de 220 mm, pistón simple |
Largo / ancho / alto | 2.020 / 785 / 1.115 mm |
Distancia entre ejes | 1.330 mm |
Altura del asiento | 810 mm |
Distancia del suelo | 165 mm |
Dep. de combustible | 10 L |
Peso en orden de marcha | 140 kg en orden de marcha |
Velocidad máxima | 110 km/h |
Velocidad máxima
Es un impulsor muy prolijito en su funcionamiento y muy agradable de conducir. Entrega progresiva y lineal, con un escalonamiento de las relaciones de caja que le colaboran a sacar lo mejor de sí. Las vibraciones no son un problema, notándose presentes por encima de las 8.000 rpm pero siempre manteniéndose como uno de los motorcitos más serenos de la categoría. La velocidad máxima está en el orden de los 110 km/h, sin llegar al corte.
Motor
Se trata del conocido bloque de tecnología Blue Core de 149 cc, refrigerado por aire, SOHC de 2 válvulas y alimentado por inyección electrónica, que es capaz de ofrecer una potencia máxima de 12,4 Cv a 7.250 rpm y un par de 13,3 Nm a 5.500 rpm, siempre asociado a una caja de 5 marchas de un accionamiento muy suave, corto y preciso.
Algo que me parece rarísimo es que la FZ-X tenga menos capacidad de combustible (exactamente 3 lts menos) que la FZS-FI, totalizando unos 10 litros. No sé si Yamaha lo habrá hecho para contener el peso, pero me resulta raro ya que esta moto, dadas sus características es más apta para animarse a recorrer otro tipo de distancias. Bueno, así y todo, la autonomía sigue siendo muy buena gracias a un consumo de solo 2,6 lts cada 100 kms, lo que arroja un rango de autonomía superior a los 350 kms.
Chasis y suspensiones se mantienen inalteradas, sin registrarse cambios en cuanto a configuración y recorridos. Al chasis tipo diamante de acero se asocian una horquilla convencional con barras de 41 mm con 130 mm de recorrido y un monoshock trasero regulable en la precarga del resorte en 7 posiciones con 120 mm de recorrido. De igual manera se mantienen las excelentes virtudes dinámicas de esta parte ciclo, a mi criterio, la mejor del segmento. El peso en orden de marcha de esta FZ-X es de 140 kg.
La diferencia en este apartado está dada por estos cauchos “doble propósito” de marca MRF que permiten ciertas licencias a la hora de salirse del asfalto. Las medidas son las mismas de la FZ, con un 100/80 adelante y un generoso 140/60 detrás, siempre sobre llantas de aleación de 17”.
El sistema de frenos lo firma Bybre, con un disco delantero de 282 mm mordido por una pinza de doble pistón y un trasero de 220 mm con pinza monopistón. Respecto al desempeño, este sistema no ofrece lugar a la crítica con un frenado muy bueno, de buen tacto y fácil de dosificar. Otra exclusividad para el segmento, pero que en este caso repercute de manera directa en nuestra seguridad, es que esta FZ-X cuenta con ABS delantero, lo que termina por redondear una relación precio/producto aún más atractiva.
En síntesis, una moto que ofrece mucho más que un diseño distinto a la FZ conocida, con una ergonomía muy distinta que puede acercarla a otro tipo de usuario y necesidades, con una impronta símil off road que permite alguna licencia extra y con una tecnología de conectividad inédita en el segmento.
Fotos
Comenzó su carrera en el periodismo especializado en 2010, cuando fue invitado por el staff de la LA MOTO a participar con una colaboración especial. A partir de esta colaboración se transformó en el encargado de analizar todas las motos que son evaluadas en el medio.
Actualmente lleva más de 300 motos evaluadas entre las que abundan las de gama media y baja, que representan el grueso del mercado de la motocicleta. También ha participado de lanzamientos y presentaciones internacionales, donde ha podido analizar diferentes productos antes de sus llegadas a los concesionarios.
Análisis de mercado, en base a datos concretos de las distintas Cámaras del sector, son parte de las columnas editorializadas que se publican en este medio.