Un punto destacable es su piso totalmente plano y su muy buen espacio para las piernas. Esto hace que este scooter sea compacto y cómodo para pilotos de casi metro ochenta. Sin embargo, el segundo a bordo no contará con mucho espacio, aunque será suficiente para desplazamientos cortos.

El asiento colabora con un tamaño y mullido correctos para ambos ocupantes y está forrado con un tapizado antideslizante. Por debajo del mismo, que se destraba mediante una cerradura ubicada en el carenado izquierdo, accedemos al tanque de 5,5 litros de capacidad y a un compartimiento que podrá albergar un casco tipo jet. Este espacio se complementa con el portaobjetos ubicado en el interior del pecho que tiene muy buena capacidad dada su profundidad, pero que no cuenta con ningún tipo de tapa. Como valor agregado, dispone de un toma USB de 12v como para ir cargando el celu mientras nos dirigimos a la oficina. Por detrás del asiento se fija una robusta parrilla que hace las veces de asas de sujeción para nuestro acompañante y que permitirá atar algún bulto pequeño sobre la misma o bien anexarle un baúl tipo top case para incrementar en buena medida la capacidad de carga del Styler.

Como ya mencionamos, su condición de compacto no lo asusta a la hora de recibir pilotos de poco más de una talla media. Una vez dispuestos a emprender la marcha nos encontramos con un instrumental analógico de dos cuadrantes, el central y mayor para el velocímetro y uno más pequeño para el de nivel de combustible, unos poquitos testigos luminosos y odómetro total. Todo dispuesto en un entorno moderno y bien integrado al carenado del manillar. Los comandos a los lados son los clásicos en ubicación y calidad de este tipo de scooters. Cabe señalar que ofrecen un correcto funcionamiento. Los puños son totalmente lisos, pero nosotros los preferimos con algún tipo de dibujo/relieve porque aportan un tacto más agradable. Por su parte, los espejos resultaron de rápida regulación y ofrecieron una decente visión de lo que sucedía a nuestras espaldas. Como detalle, el tambor de arranque posee traba de seguridad. Otros ítems de equipamiento son el gancho para bolsas y el caballete central (ojo, roza con facilidad al inclinarlo o al subir algún cordón).

La parte ciclo es convencional y está compuesta por un chasis de tipo cuna de tubos de acero, una horquilla hidráulica y un doble amortiguador trasero de doble efecto. El setting de fábrica del conjunto (que no posee regulación alguna) es tirando a rígido. No obstante, no llega a ser molesto ni incómodo para desenvolverse con soltura a diario por la ciudad. El sistema de frenos, por su parte, es quizá el punto más criticable del modelo. Si bien el disco delantero posee un desempeño acorde a las prestaciones del scooter, su tacto en la palanca no convence demasiado. Tampoco convence el tacto del freno trasero que es a disco simple con pinza de doble pistón que además cuenta con un poder muy pobre dado el tambor que monta es pequeño.

El impulsor es el conocido monocilíndrico, 4 tiempos, 2 válvulas, de 149,6 cc y alimentado por carburador. El mismo eroga una potencia de 10 CV. La refrigeración es forzada por aire y posee arranque eléctrico o por patada. De arranque inmediato y preciso, muestra un ralentí muy suave. Las vibraciones son las esperadas en un producto de origen asiático, no obstante no son acusadas ni molestas. La entrega de potencia es muy progresiva y lineal, lo que lo hace un vehículo muy dócil para pilotos novatos.

La velocidad máxima está en el orden de los 95 km/h, marca acorde a las características e intenciones del modelo. El dato de consumo, según fábrica, es de 3,3 litros para recorrer el centenar de kilómetros. Sin embargo, por las características del modelo intuíamos que la cifra debía ser bastante inferior y el consumo para recorrer los 100 km en tramos urbanos resultó rondar los 2,8 litros según pudimos comprobar durante la intensa prueba que efectuamos en las colapsadas calles de Buenos Aires. El funcionamiento de la transmisión automática de variador continuo es correcto, no muestra fisuras ni vicios raros, aunque debemos mencionar un excesivo recorrido del puño derecho para lograr el movimiento.